sábado, 27 de abril de 2013

Testimonio - 2 de Abril de 2013 (1)



Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 16 de abril de 2013

De mi mayor consideración:

Motiva la presente nota dar testimonio de lo sucedido el pasado 2 de Abril del corriente año, en la intersección de las calles Luis Viale y Concordia, del barrio porteño de Villa Santa Rita.


Vivo aquí desde hace casi 30 años, y dado que es una zona donde suele inundarse la calle y aún la vereda decidí hacer una reforma estructural a la casa, elevándola hasta una altura por encima de los 80 cm de la vereda, en la línea de edificación. Desde el año que se inició y terminó la mencionada reforma, 1995, nunca más volvimos a vivir un episodio de esa naturaleza. Dejo asimismo constancia, que esa altura es superior aún a la de la Avenida J. B. Justo.

El pasado 2 de Abril, ante los hechos por todos conocidos, nos vimos envueltos en la desagradable y desilusionante realidad de que la zona, a pesar de los anuncios de público conocimiento e inauguración del canal aliviador de la calle Cuenca, se inundó hasta niveles desconocidos con anterioridad. El agua superó largamente el metro de altura, y en algunas casas llegó a entrar por la ventana, ingresando también por los pluviales y la cloaca. Todo lo anterior demuestra que esta última inundación estuvo por encima de las anteriores, en no menos de 40 cm.

Más allá de los hechos que afectaron la infraestructura y los bienes materiales, como electrodomésticos, muebles y objetos, y aquellos otros bienes, con valor más simbólico que material, como las presentaciones y diseños efectuados por mi hija en la carrera de arquitectura o fotografías y elementos de orden afectivo, existe una razón de la cual quiero dejar constancia, porque amerita una investigación.

El comportamiento de las aguas durante dicha inundación adquirió características totalmente distintas. Con anterioridad, y en todos los casos, en el momento que “subía” el agua, es decir que las bocas de tormenta no daban abasto y comenzaba a acumularse en la calle, el agua corría lentamente con dirección de Concordia a Cuenca y en los momentos que el agua comenzaba a “bajar” adoptaba la dirección contraria. Durante esta inundación el comportamiento de las aguas fue distinto. Es decir, el agua subía en dirección de Concordia a Cuenca pero en forma torrentosa, esto implicaría que la boca del canal aliviador, ubicado en la calle Cuenca, no funcionó como se esperaba. Asimismo, en todas las veces anteriores, el desagote del agua acumulada, en calles y veredas, era rápido, en especial teniendo en cuenta, que en la esquina mencionada, Viale y Concordia, hay 5 bocas de tormenta. En este caso, también el desagote, tuvo características excepcionales, dado que el agua se estancó por casi 4 horas.

Por todo lo anteriormente detallado, creo que esta inundación y en esta zona, donde se generó gran nivel de expectativa por las inauguraciones recientes, dado el elevado costo de las obras y los desilusionantes y adversos resultados obtenidos, amerita de los órganos correspondientes, una profunda investigación que dilucide los acontecimientos y las características adoptadas por las aguas.

Si a lo anterior sumamos, que cayeron 150 mm en un período no menor de 10 hs contra los más de 300 mm del año 1985, en menor cantidad de horas, estamos ante la peor inundación de este barrio, por lo menos en los últimos 30 años. Donde sí existe una clara coincidencia, es en los altísimos niveles de basura existentes en las calles, que en muchos casos, por una recolección insuficiente e ineficaz, por la carencia de contenedores y por la acumulación de retazos y deshechos telas, producto de los talleres textiles existentes en la zona, pudieron haber contribuido como un factor que agravó la acumulación de agua y su drenaje correspondiente.                                                            
Por último, los 7 días subsiguientes, sin corriente eléctrica, producto de una lluvia, que comparativamente con las anteriores, en la Capital Federal no están dentro de las peores, puso de manifiesto el desamparo y la vulnerabilidad del barrio.                                                                              
Con la esperanza de que se inicien las acciones correspondientes para evitar próximas inundaciones, y las investigaciones que arrojen luz sobre los hechos, ante el peligro que estas generan, en especial para los vecinos más vulnerables, como los adultos mayores y los niños y que en el futuro no tengamos que lamentar ningún tipo de pérdidas, me pongo a disposición, para aportar todos los              detalles, que puedan ser de interés para el esclarecimiento del tema.                                              


Acompaño la presente, con fotos que ilustran el desarrollo de lo narrado


                                                                     Sin otro particular, saludos cordiales.


Nora Andrea Terenziani
DNI 12644407


El circulo AMARILLO marca el sitio desde donde se da el Testimonio; el circulo ROJO indica el lugar donde se encuentra la derivación de calle Cuenca del denominado "tunel largo" (aliviador del Maldonado)




No hay comentarios: